«Una tarde de mayo caminaba por la Gran Vía de la capital española cuando las luces azules y el mobiliario minimal de un club llamaron mi atención. Era 2008 y estaba en Madrid por uno de mis numerosos viajes de negocios. Al entrar, me senté en el mostrador para admirar al bartender que, con dedicación y creatividad, estaba preparando una bebida con un altísimo sentido estético. Ahí y en ese preciso momento, probé mi primer Gin Tonic Premium: una experiencia que ha cambiado literalmente mi vida. Desde entonces, en cada viaje busco una ginebra diferente para conocer todos los secretos de nuevos botánicos y nuevos productores a lo largo del planeta». Empieza así nuestra charla con Gianpiero Giuliano, empresario trotamundos cuya ginebra – «Piero Dry Gin» (o también «Gin Piero») –  es un claro homenaje a sus viajes y sus genes internacionales, pero también a sus raíces italianas.

Una ginebra exclusiva, intensa y llena de significados, creada para ser equilibrada y suave, pero al mismo tiempo con carácter. Su cata encuentra su máxima expresión ya en pureza, porque después de repetidas pruebas y experimentos con más de 30 plantas diferentes, en busca del destilador y del destilado ideal, Gianpiero encontró la mezcla perfecta con 6 botánicos especiales. No es casual que en 2018 el trabajo final de nuestro protagonista, después de un MBA internacional con la Universidad de Michigan – Dearborn, se haya centrado en la creación de una nueva ginebra en todas sus fases comerciales, sumando a las 4 «P» del Marketing Mix (Product, Price, Place y Promotion) la quinta «P» de Passion, tan arraigada en su familia.

La historia de «Piero Dry Gin» nace en España y se desarrolla en Italia, aunque América del Sur también tuvo su propia influencia: «Nací en la provincia de Brescia hace 45 años y hoy vivo a pocos kilómetros del lago de Garda. Mis abuelos al final de la Segunda Guerra Mundial -como muchos italianos- emigraron a Sudamérica en busca de fortuna, los maternos en Caracas y los paternos en Buenos Aires. Ahí es donde nacieron mis padres, quienes se quedaron en este continente unos años y luego regresaron a Italia, en su pueblo de origen en Molise. En la provincia de Campobasso pasaron su juventud, se enamoraron y, apenas adultos, huyeron hacia el norte del país para buscarse un trabajo y ganarse la vida. Por motivos laborales, yo mismo viví en Brasil y en España, definitivamente el castellano es mi segundo idioma», nos cuenta Gianpiero.

De hecho, su «Piero Dry Gin» es una ginebra con un espíritu internacional, producida en pequeños lotes para exaltar al 100% el dulzor de la naranja, el amargor del enebro, la nota especiada del cardamomo, el picante del jengibre y la nota floral de un ingrediente secreto que Gianpiero no quiere revelarle a nadie, a nosotros tampoco. «Porque cada receta tiene uno», nos repite más veces durante nuestra entrevista. Su «Piero Dry Gin», realizado con la colaboración de la Destilería Enrico Toro (Abruzzo) y de su maestro destilador Enzo, ya se dio a conocer tanto en Italia como en el extranjero, ganando tres reconocimientos mundiales: la medalla de plata en el «Gin Magazine Award» 2021, la medalla de plata en el «Concurso Internacional de Vinos y Licores» 2020 en Londres y también el premio «Excellence Spirits Award» 2020 del «Bar Roma Show».

Un proyecto muy bien estructurado que se prepara así para salir de los confines de Italia incluso a nivel de distribución: «De momento estamos trabajando para que nuestro producto tenga éxito primero en Italia, pero luego saldremos al extranjero en busca de socios estratégicos. Me gustaría mucho empezar desde España, un país que históricamente ama la ginebra», acaba Gianpiero. Entre pasado, presente y futuro, sin olvidarse de encontrar la metáfora adecuada para celebrar su «Piero Dry Gin» como más se merece: «Me gusta contar mi ginebra con la metáfora del disco de Newton: está hecha de muchos colores, pero cuando gira es completamente blanca, porque en todo momento el conjunto debe recuperar la riqueza de todas sus partes sin que ninguna prevalezca. El resultado final es así un sabor que recuerda a quienes lo inspiraron y crearon, con un contraste verdaderamente único».

www.pierodrygin.com